Beneficios del ejercicio físico para el trabajo
¿Cómo incentivar el ejercicio físico en el trabajo?
Las empresas deben incentivar la práctica de ejercicio físico. Desde nuestra clínica motivamos a nuestros empleados a hacer actividad física desde el mismo centro de trabajo.
Programa integral para la empresa
Para la empresa, es una gran oportunidad promover la salud dentro de su plan. Por una parte, se reconoce la necesidad de que debe existir una estrategia global que implique a todos los trabajadores, que realmente se mejore la calidad de vida de todos ellos independientemente del puesto que ocupen.
Por otro lado, se mejora la productividad en su conjunto, teniendo en cuenta parámetros de medición e indicadores que nos den resultados fiables una vez ha sido implantado.
Objetivos
- Planificar una estrategia de salud laboral proactiva, que vaya más allá de la prevención de riesgos laborales.
- Establecer unos procedimientos y hábitos dentro de la empresa para concienciar y actuar de forma saludable dónde el trabajador se implique en el proceso.
- Rentabilizar la inversión en salud de la empresa optimizando la gestión preventiva.
Metodología
- Se realizará a los participantes un test personal para recabar datos específicos con respecto a su historial y perfil de AF. (Conocimiento de hábitos de actividad física, historial de enfermedades y lesiones musculo esqueléticas, nivel cardiorrespiratorio y nutrición).
- Durante todo el proceso se realizarán, reuniones directas con cada participante con el propósito de facilitar cambios duraderos. Estas entrevistas se harán preferentemente de forma presencial y, si no es posible, con plataformas online.
- Cada programa es totalmente personalizado: se diseña un plan alineado con los valores del participante, apoyado en sus fortalezas y se pasa a la acción de manera más rápida.
- Fijación de metas y objetivos a 6 meses: nos centramos en lo que el trabajador está dispuesto a hacer para llegar a donde le gustaría estar en el futuro. Al finalizar el proceso se hace una valoración del nivel de consecución.
Rutinas de ejercicio físico según el trabajo
- Las lesiones musculo esqueléticas suelen ser frecuentes entre las personas que trabajan. La prevención de las lesiones musculo esqueléticas debe ser una prioridad para las empresas. Por ello, deben incentivar la práctica de los ejercicios físicos que nos ayudarán a cuidar mejor nuestra espalda que es la zona del cuerpo que más sufre cuando trabajamos. Os presentamos unos ejercicios que podéis hacer durante vuestra jornada laboral. Los primeros los tenemos que realizar a media mañana:
- Giraremos la cabeza hacia el lado derecho. Lo tendremos que hacer hasta que el mentón nos quede en la misma dirección que el hombro. Tendremos que mantener esa postura durante 5 minutos y hacerlo también hacia el otro lado.
- Tendremos que mover la cabeza hacia delante y hacia atrás, aguantando también durante 5 minutos al final de la posición.
- Cercaremos los hombros a las orejas y mantendremos la postura 10 segundos.
- Nos levantaremos y pondremos la mano en la cintura. Con los hombros hacia atrás, contraeremos el abdomen para mantener la postura 10 segundos.
- Estando también de pie, separaremos las piernas e inclinaremos las rodillas. En esta postura, estiraremos los brazos hacia abajo.
- También de pie, tendremos que subir una rodilla y otra al pecho de forma alternativa durante tres veces.
- Tres veces también tendremos que balancear el pie.
- Realizaremos movimientos circulares con el tobillo.
- Estiraremos los brazos hacia adelante. Seguidamente, juntaremos las palmas de las manos y haremos movimientos arriba, abajo y a los lados.
A media tarde, también debemos realizar una serie de ejercicios:
- Mirando hacia el frente, pondremos la mano derecha en la oreja izquierda y giraremos la cabeza a la derecha. También lo haremos de la forma contraria.
- Pondremos los brazos en la espalda cogeremos una muñeca con su mano contraria y tiraremos.
- Moveremos los hombros hacia las orejas y los giraremos en círculos.
- Estando de pie, abriremos las piernas 15 centímetros, contraeremos el abdomen, inclinaremos la espalda hacia el frente y estiraremos los brazos.
- Caminaremos de forma exagerada 10 segundos.
- Juntaremos las manos y rotaremos las muñecas.
- Estiraremos el brazo hacia adelante con la palma de la mano hacia arriba. Con la otra mano, estiraremos los dedos hacia abajo.
¿Cómo aprovechar todo mi potencial?
- Reduce los días de enfermedad
- El ejercicio cotidiano y regulado fortalece tu sistema inmune, por lo que tienes menos riesgo de contraer diferentes enfermedades, lo que te permite ausentarte menos al trabajo por enfermedad. Sin embargo, en demasía pude ocasionar daños, ya que puede aumentar el estrés, lo que reduce tu sistema inmune.
- Simplemente escucha a tu cuerpo y descansa cuando lo necesites.
- Es una forma rápida de motivarse
- Para mejorar la productividad, ejercitarse en pequeñas dosis de ejercicio moderado es más efectivo, ya que mejoran tu estado de ánimo, alivian el estrés y aumentan tu concentración sin cansarte por completo.
- Esto puede ser tan simple como un entrenamiento casero rápido de ejercicios de peso corporal, un trote corto o una caminata rápida, que también ayuda a mejorar la digestión y a sentirte menos hinchado después del almuerzo.
- Reduce el riesgo de problemas de salud
- Intenta moverte lo máximo posible durante el día. Sube las escaleras o ve a hablar con los colegas en lugar de llamar o enviar emails. Estos pequeños cambios te ayudarán a sentirte más fresco y productivo, además de añadir un poco de movimiento en tu trabajo.
Conclusiones sobre la actividad física en el trabajo
A modo de resumen general, se podría decir que la mayoría de entornos laborales generan hábitos de inactividad física y sedentarismo.
Estos dos elementos son dos factores de riesgo a tener en cuenta en el tratamiento de diversas enfermedades. Para ello, la actividad física en trabajo resulta ser una herramienta del entrenamiento efectiva para controlar y evitar los diversos efectos negativos.
Finalmente, las evidencias analizadas demuestran los claros beneficios de la actividad física en el trabajo: hábitos saludables, cambios fisiológicos, parámetros de salud, productividad, rehabilitación del miembro superior, bienestar psicológico, absentismo laboral, capacidad de trabajo, desórdenes músculo-esqueléticos y agotamiento.