Cargando... Por favor espere

 

Bursitis

julio 23, 2021by Eiler F Bustamante

Bursitis

Una bursitis es la inflamación de una bursa, una especie de bolsita llena de líquido que se sitúa entre el hueso por un lado y los tendones y los músculos por otro, facilitando así la movilidad al disminuir el rozamiento, es decir, sirve para almohadillar los movimientos.

¿Qué tipos de bursitis existen?

Existen dos formas importantes de clasificar la bursitis. La primera, divide las bursitis en agudas y crónicas:

Bursitis aguda: en ella, el dolor y los síntomas de inflamación aparecen de forma brusca.

Bursitis crónica: se trata de una bursitis aguda que no se ha resuelto adecuadamente o de repetidos episodios de bursitis aguda.

En segundo lugar, también podemos atender a la localización de las bursitis. Las más comunes suelen ser las de:

Hombro: de ellas, algunas bursitis se asocian a lesiones tendinosas muy habituales, como la lesión del manguito de los rotadores (un conjunto de tendones en el hombro).

Cadera.

Rodilla.

Codo.

Muñeca.

¿Cuáles son los síntomas?

Se presenta dolor e inflamación en el área afectada.

Prevención de los síndromes reumáticos de los tejidos blandos

(Bursitis, tendinitis, dolor miofacial, túnel carpiano, codo de tenista, codo de golfista, tenosinovitis y fascitis plantar)

Dado que muchas condiciones de los tejidos blandos se deben a uso excesivo, el mejor tratamiento es la prevención. Es importante evitar o modificar las actividades que causan el problema. Se deben corregir condiciones desencadenantes como diferencias en la longitud de las piernas, posición o técnica incorrecta en la ejecución de deportes o trabajo.

Esté consciente del uso excesivo o daño durante sus actividades cotidianas y cambie sus hábitos para prevenir problemas. De lo contrario, los problemas pueden persistir u ocurrir repetidamente. A continuación se dan algunas ideas de cómo evitar problemas futuros:

¿Cuál es la causa de la bursitis?

La bursitis es comúnmente causada por:

El uso excesivo y los movimientos reiterados. Estos pueden incluir actividades cotidianas, como usar herramientas, trabajar en el jardín, cocinar, limpiar y escribir con un teclado.

Períodos prolongados de presión en una zona. Por ejemplo, los instaladores de alfombras, los techistas o los jardineros, que trabajan todo el día sobre las rodillas, pueden desarrollar bursitis en la rótula.

El envejecimiento, que puede hacer que la bursa se desintegre con el tiempo.

Una lesión repentina, como un golpe en el codo.

Diagnóstico

Generalmente, los médicos pueden diagnosticar bursitis de acuerdo con la historia clínica y una exploración física. Las pruebas, si son necesarias, pueden ser:

Pruebas de diagnóstico por imágenes. Las imágenes de rayos X no pueden establecer de manera segura el diagnóstico de una bursitis, pero pueden ayudar a descartar otras causas del malestar. Es posible que se haga una ecografía o una resonancia magnética si no se puede diagnosticar la bursitis fácilmente con la exploración física sola.

Análisis de laboratorio. El médico podría indicarte análisis de sangre o un análisis del líquido de la bolsa sinovial inflamada para identificar la causa de la inflamación y el dolor en las articulaciones.

¿Cómo se trata la bursitis?

El tratamiento de la bursitis puede reducir el dolor y la inflamación. Algunos tratamientos comunes incluyen:

Descansar y elevar el área lesionada.

Limitar la actividad, para no empeorar la lesión.

Tomar medicamentos que reduzcan la inflamación, como aspirina, naproxeno o ibuprofeno.

Hacer ejercicios suaves de estiramiento y fortalecimiento

Poner compresiones al área lesionada.

Colocar una férula, tablilla o banda en la articulación lesionada.

Si la bursitis es causada por una infección, quizás el médico le recete antibióticos. Su médico también le puede recomendar hielo para las lesiones repentinas y graves, pero la mayoría de los casos de bursitis son a largo plazo, y el hielo no ayuda.

Si la bursitis no mejora, su médico puede inyectarle un medicamento corticoesteroide en el área alrededor de la bursa inflamada. Aunque estas inyecciones son comunes, deben usarse con precaución porque pueden hacer que los tendones se debiliten o se rompan. Si la bursitis no mejora después de seis meses a un año, su médico puede recomendarle cirugía para reparar los daños y aliviar la presión sobre las bursas.

¿Se pueden prevenir las bursitis?

Para reducir el riesgo de desarrollar bursitis:

Practica deportes diferentes para evitar hacer los mismos movimientos a lo largo de todo el año.

Usa rodilleras, colchonetas o cojines para arrodillarte o sentarte durante mucho tiempo seguido.

Usa las técnicas adecuadas al hacer deporte.

Calienta y estira antes y después de hacer deporte.

Detén las actividades que te provocan dolor y acude a un médico o preparador físico para que te evalúe antes de retomar la actividad.

 

Contamos con servicios de calidad, contáctenos

Teléfono: +1 (832) 538 – 1088

Sitio web: www.clinicahispanaharrisburg.com

Correo-e: medico@clinicahispanaharrisburg.com

Horario: lun – sáb 9AM-9PM     dom 9AM-5PM

Dirección: 7323 Harrisburg Blvd, Houston, TX 77011

Traducir