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Osteomielitis

La osteomielitis es una infección del hueso. Puede ser causada por una variedad de agentes microbianos (el más común es el estafilococo aureus) y situaciones incluyendo:

Una lesión abierta hasta el hueso, como por ejemplo una fractura con las esquinas de los huesos penetrando la piel.

Una infección de cualquier otra parte del cuerpo, como una neumonía o una infección del tracto urinario que se ha extendido al hueso a través de la sangre (bacteremia, sepsis).

Un trauma menor, que puede llevar a tener un coágulo de sangre alrededor del hueso y luego una infección secundaria debido a la siembra de las bacterias.

Bacteria en el flujo sanguíneo bacteremia (dentadura pobre), que se deposita en una zona central (localizada) del hueso. Esta zona de bacterias en el hueso comienza a crecer, lo que resulta en la destrucción del hueso. Sin embargo, se suele formar hueso nuevo alrededor de la zona afectada.

Una herida abierta crónica o una infección del tejido blando puede con el tiempo extenderse a la superficie del hueso, llevando a una infección secundaria del hueso.

La osteomielitis afecta cerca de dos de cada 10,000 personas. Si se deja sin tratar, la infección puede volverse crónica y causar una pérdida del suministro de sangre al hueso afectado. Cuando esto ocurre, puede llevar a la muerte del tejido óseo.

La osteomielitis puede afectar tanto a los niños como a los adultos. La bacteria u hongos que pueden causar osteomelitis, sin embargo, difieren entre estos dos grupos. En los adultos, la osteomielitis a menudo afecta a las vértebras y la pelvis. En los niños, la osteomielitis normalmente afecta los lados adyacentes de los huesos largos. Los huesos largos (huesos de los miembros) son huesos grandes y densos que proporcionan fuerza, estructura, y mobilidad. Incluyen el femur y la tibia en las piernas, y el húmero y el radio en los brazos.

Causas

La infección ósea casi siempre es causada por bacterias. Pero también puede ser provocada por hongos u otros gérmenes. Cuando una persona tiene osteomielitis:

Las bacterias u otros microorganismos pueden propagarse a un hueso desde la piel, músculos o tendones infectados próximos al hueso. Esto puede ocurrir bajo una úlcera cutánea.

La infección también puede empezar en otra parte del cuerpo y propagarse al hueso a través de la sangre.

La infección también puede empezar después de una cirugía del hueso. Esto es más probable si la intervención se realiza después de una lesión o si se colocan varillas o placas de metal en el hueso.

En los niños, casi siempre están involucrados los huesos largos de los brazos o las piernas. En los adultos, los huesos de los pies, la columna (vértebras) y las caderas (pelvis) son los más comúnmente afectados.

 

Signos y síntomas

Los niños con osteomielitis con frecuencia sienten dolor agudo en el hueso infectado y pueden tener fiebre y escalofríos, sentirse cansados o nauseabundos, o tener una sensación general de que no están bien. La piel sobre el hueso infectado puede estar dolorida, roja e inflamada.

Con frecuencia es difícil diagnosticar la osteomielitis en los bebés y niños pequeños porque no siempre sienten dolor o síntomas específicos en el área de la infección. Además, la gente mayor que tiene aterosclerosis o diabetes a veces pierde la capacidad para sentir dolor (llamado neuropatía), por lo tanto, sus síntomas también pueden no ser evidentes. En el caso de los adolescentes, que suelen sufrir de osteomielitis luego de un accidente o una lesión, el área infectada puede comenzar a doler nuevamente luego de que inicialmente haya mejorado.

 

Factores de riesgo

Normalmente, los huesos son resistentes a las infecciones, pero esta protección disminuye a medida que envejeces. Otros factores que pueden hacer que los huesos sean más vulnerables a la osteomielitis pueden incluir los siguientes:

Lesión reciente o cirugía ortopédica

Una fractura de hueso grave o una herida profunda por punción les da a las bacterias una vía para entrar al hueso o tejido cercano. Una herida profunda por punción, como la mordedura de un animal o la perforación de un clavo a través del calzado, también puede proporcionar una vía para la infección.

La cirugía para reparar huesos rotos o para reemplazar articulaciones desgastadas también puede abrir una vía para que los gérmenes ingresen al hueso. Un implante ortopédico es un factor de riesgo para la infección.

Trastornos de la circulación

Cuando se dañan o se obstruyen los vasos sanguíneos, el cuerpo tiene dificultades para distribuir las células que combaten infecciones y evitan que proliferen las infecciones pequeñas. Lo que comienza como un corte pequeño puede evolucionar y convertirse en una úlcera profunda que expone el tejido inferior y los huesos a las infecciones.

Problemas que requieren líneas intravenosas o catéteres

Hay una serie de afecciones que requieren el uso de tubos de uso médico para conectar el mundo exterior con los órganos internos. Sin embargo, estos tubos también pueden servir para que los gérmenes ingresen al cuerpo, lo cual aumenta el riesgo de una infección en general y esto puede provocar osteomielitis.

Afecciones que deterioran el sistema inmunitario

Si tu sistema inmunitario se ve afectado por un trastorno médico o un medicamento, tienes un mayor riesgo de padecer osteomielitis. Los factores que pueden suprimir el sistema inmunitario incluyen los siguientes:

  • Tratamiento oncológico
  • Diabetes mal controlada
  • Necesidad de tomar corticoesteroides o medicamentos llamados inhibidores del factor de necrosis tumoral

¿Cuánto dura una osteomielitis?

La mayoría de las personas con osteomielitis se encuentran mejor a los pocos días de iniciar el tratamiento. Los antibióticos administrados por vía intravenosa se cambian a antibióticos los administrados por vía oral (por boca) al cabo de entre 5 y 10 días de tratamiento. La gente se suele medicar con antibióticos durante por lo menos un mes, y a veces durante más tiempo, dependiendo de los síntomas que presente y de los resultados de sus análisis de sangre.

 

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